Aprovechando El Tiempo
Aprovechando bien el tiempo, porque los días
son malos.
Efesios 5:16
¿Ya se dieron cuenta a
que día estamos hoy? 17 de diciembre, solo faltan 14 días más y el
año 2019 se termina. El año pasado, por estas fechas, escuche a un predicador
que decía, así como hemos llegado al último mes de este año 2018, llegaremos si
Dios nos lo permite al último mes del año 2019, cuando yo escuche estas
palabras inmediatamente pensé que para esa fecha faltaba mucho, pero ya estamos
a mitades del último mes de este año en curso.
No sé si soy el único que cuando llegan estas fechas, los últimos días
de cada año, me pongo a pensar en todas las cosas que sucedieron a lo largo del
año, siempre recuerdo las cosas buenas que hice y me siento contento por eso,
pero también pienso en las cosas que hice mal y por supuesto en las cosas que
pude haber hecho mucho mejor.
El tiempo es un excelente maestro, también en
ocasiones es un excelente doctor porque te ayuda recuperarte de situaciones
difíciles, pero en otras ocasiones puede llegar a ser algo que
se ponga en nuestra contra.
A finales del año pasado, yo empecé con malestares en mi cuerpo, a los
cuales no les preste la atención necesaria, confiaba que al otro día iba a
sentirme mejor, y paso un mes y mi condición empeoraba, aún así pensaba que esa
enfermedad pasaría, un día decidí ir a una consulta médica con un especialista
y recuerdo muy bien lo que me dijo: “Esto ya llego al punto de tener que
intervenir quirúrgicamente, no hay otra forma de acabar con esto, no podemos
esperar más.” Yo escuche esas palabras y me preocupe, sentí demasiado
estrés después de oír esas palabras, ¿Qué crees que hice? .... Deje pasar aún más tiempo tratando
de evitar algo que ya era inevitable, dos meses después de eso, llegue al
hospital a punto de perder el riñón, gracias a Dios, aunque espere demasiado
tiempo todavía había un poquito de tiempo para operarme y mi riñón quedo a
salvo.
Realmente esto es lo que sucede, el ser humano cree que es dueño del
tiempo, cree que el tiempo lo puede manejar a su manera, creen que el tiempo
los va a esperar, cuando en realidad eso nunca va a pasar.
¿Qué has hecho con tu tiempo durante este año? Es una pregunta
que debes de hacerte y responderte con total sinceridad, ¿Lo aprovechaste, lo invertiste en algo
bueno, hiciste algo de provecho? Yo espero que tu respuesta sea que
sí. Pero sé que todos somos culpables de no haberlo utilizado de la manera
correcta.
No te jactes del día de mañana; Porque no sabes qué dará de sí el día.
Proverbios
27:1
Vivimos preocupados, pensando en que haremos el día
de mañana, cuando ni siquiera sabemos si Dios nos dará el mañana, nunca debemos
de decir que el mañana es nuestro, porque toda nuestra vida, todas nuestras
horas están en el reloj de Dios, por eso debemos de vivir la vida como si fuera
nuestro último día, no debemos de esperar hasta mañana si el presente lo
tenemos, debemos de aprovechar nuestro tiempo el día de hoy, hoy aun tenemos
tiempo de orar, de leer la palabra de Dios, de vivir de una manera que le agrada
a Dios.
No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy, la Biblia ya nos ha
dado mandato de aprovechar nuestro tiempo, al igual que otras cosas que la
Biblia nos ordena y debemos de obedecer, esto también debemos de hacerlo. Cuida
tu tiempo, valora cada día que Dios te da, sácale el máximo provecho al tiempo.
La palabra de Dios nos habla muy claro sobre el tiempo, la instrucción
que nos da sobre el mismo es aprovecharlo.
El tiempo es uno de los regalos de Dios para
la humanidad pero ese regalo está a punto de llegar a su fecha de expiración, puedes recuperar el
dinero que gastaste, perdiste algo y puedes volverlo a encontrar, pero el tiempo que gastaste
ya no va a regresar a ti, el tiempo que perdiste mucho menos volverás a tenerlo, no te confíes
tanto, que el tiempo pasa muy rápido.
Pero
esto digo, hermanos: que el tiempo es corto…
1
Corintios 7:29
Por todas estas razones, el tiempo vale más que cualquier cosa en este
mundo. ¿A qué lo dedicas? ¿En qué
lo inviertes?
La razón por la cual debemos de aprovechar el tiempo la encontramos en
la segunda parte del verso que leíamos al empezar, porque los días son
malos, y si los días del apóstol Pablo eran malos, ahora imagínate cuanto más
los de nosotros.
El mundo hoy en día está muy mal, estamos oyendo tantas malas noticias,
estamos viendo como el mundo entero esta aceptando leyes que van completamente
en contra de la palabra de Dios, las cosas que Jesucristo dejo escritas en la
Biblia de las señales de los últimos tiempos ya se pueden empezar a ver muy
claramente, este mundo cada día va de mal en peor.
¿Las cosas que estamos haciendo valen la pena? Hay cosas que
son necesarias hacer en tu diario vivir, pero hay otras cosas que no son
necesarias, que solo están robando tu tiempo.
Jóvenes, ¿están orando cada
mañana? Antes de salir de sus casas, ¿Pasan un tiempo con Dios?
Si hay algo que les está estorbando, quítenlo, es
mejor aprovechar el tiempo.
En la vida del ser humano, es muy importante el tiempo, es muy
importante distribuir el tiempo día tras día, nadie puede decirme que no.
Generalmente decimos: hoy a tales horas tengo que hacer esto, tengo que
hacer lo otro, contamos las horas, contamos el tiempo, y tratamos de ponerle un
tiempo específico a cada cosa que hacemos, pero ¿si te has dado cuenta,
para las cosas que realmente nunca quieres hacer curiosamente son para las
cuales nunca tienes tiempo? Ojala
que para las cosas de Dios nunca digas la típica frase “es que no tengo
tiempo”.
Si hoy hay tiempo, hay que decirle a Dios, he vivido equivocadamente, he
desaprovechado el tiempo, pero quiero cambiar, quiero aprovechar estos momentos
más que me das de vida.
Todo lo que te esté quitando el tiempo
que le debes de dar a Dios, debes de cortarlo y sacarlo de tu vida.
Un día un agente de seguros recibió una llamada telefónica de una mujer
muy agitada. Quiero asegurar mi casa, dijo la señora, ¿puedo hacerlo por
teléfono? El agente le respondió: Lo siento, señora, pero me hace falta ver la
casa primero para hacer un avaluó. La señora, con mucha desesperación, le
preguntó, ¿cuándo podrá venir a ver la casa?, tendrá que venir ahora
mismo, porque la casa se está quemando.
Para la señora de esta historia, ése fue el momento preciso para
comprar el seguro de su casa. ¿Por qué comprarlo hasta que lo necesitara?
Desgraciadamente, pocos agentes de seguros están dispuestos a escribir una
póliza para una casa que se está quemando.
Y ojala hayas entendido lo que trate de decir.
Creo que no necesitamos esperar hasta que nuestra casa o nuestra vida se
estén perdiendo para darnos cuenta de la importancia de asegurarnos cada día,
para aprovechar bien el tiempo antes que sea demasiado tarde.
El día de mañana no lo tenemos, lo único que tenemos es este tiempo, si
has leído este blog ahorita, créeme que aprovechaste el tiempo muy bien, porque
Dios te hablo y es una enseñanza que te puede salvar la vida si la pones en
práctica.
Yo siempre digo que cada día más, es un día menos, la razón por la que
lo digo es porque en cualquier momento Dios nos puede llamar a cuentas y por
eso debemos de estar preparados.
Mi pastor (el anciano Glenn Wakefield) hace unas semanas atrás, predicó
uno de los mejores mensajes que le he escuchado, le puso por título “Pecador, tu mejor amigo es el tiempo” Su
mensaje se resumió en que mientras hay tiempo, hay oportunidad de arrepentirte,
de bautizarte, de ser lleno del Espíritu de Dios, pero si tu no aprovechas
ese tiempo, algún día no lo tendrás más, por eso si hoy hay tiempo aprovéchalo
para salvar tu vida.
Abner
Garcia.
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